¿Tienes hambre? Sube a la azotea y descubre un maravilloso restaurante al aire libre que fusiona como nadie los sabores locales con propuestas internacionales.
Si te apetece tomar algo, acércate al bar del hotel. Situado también en la azotea, disfrutarás de una gran variedad de bebidas y aperitivos mientras contemplas unas vistas espectaculares de la ciudad.





